Pony car con México en la sangre

Pony car con México en la sangre

abril 21, 2023 Por Itzel Monroy

No todos los días se cumplen 59 años y durante casi 6 décadas el pony car insignia de Ford, ya sea en su versión eléctrica con Mustang Mach-E o como el deportivo más poderoso de la marca con Shelby GT500, se ha ganado el corazón del público y un lugar como ícono de la cultura pop. Sin embargo, lo que muchos desconocen es este símbolo del Muscle Car estadounidense, es mucho más mexicano de lo que se cree.

Desde sus inicios, Ford quería un lugar entre el segmento de vehículos deportivos. La compañía buscaba crear un auto que sobresaliera e imponga con sólo mencionar su nombre. Es así como el 17 de abril de 1964 nació Mustang de primera generación, el modelo que redefinió el concepto de deportividad y marcó el camino de uno de los segmentos más icónicos en la historia de la industria automotriz.

Mustang pony car lindo y querido

Algo que no es muy conocido es que, entre 1965 y 1984, Mustang fue producido en México, alcanzando una cifra icónica en 1972 de 25,000 unidades. Durante ese tiempo y gracias al ingenio, talento y trabajo de los ingenieros mexicanos, Mustang se convirtió en un modelo sumamente exitoso. En 1973, durante la crisis petrolera, Ford presentó Mustang II con motores de cuatro y seis cilindros. Al poco tiempo los ingenieros de Ford en México lograron que el modelo pudiera albergar un motor V8 de 5.0 litros. Esta hazaña fue tan bien recibida, que la idea sería retomada en Estados Unidos poco tiempo después.

Una de las generaciones más exitosas de Mustang es la segunda en cuanto a términos comerciales se refiere, ya que en los cinco años que estuvo a la venta, superó las 1.1 millones de unidades comercializadas, colocándose, hasta ahora, como una de las más vendidas de la historia. Claramente el aporte de los ingenieros mexicanos logró redireccionar el camino de un modelo que hoy se considera icónico.

La unión entre Mustang y México no termina ahí pues han existido varias versiones que se vendieron de manera exclusiva en el país como la edición Freddy Van Beuren. Así mismo y debido a su gran popularidad, Mustang cuenta con apariciones en más de 30 películas mexicanas, toda una estrella del cine del país.

Uno siempre vuelve a donde fue feliz

Tal parece que el deportivo se enamoró de las tierras aztecas pues, después de aquella versión de despedida de 1984, Mustang regresó a producirse en nuestro país, esta vez en la planta de Ford en Cuautitlán Izcalli, ahora, en forma de un crossover eléctrico, el pony vuelve a presumir el sello “Hecho en México”. Con su motor eléctrico que desarrolla hasta 480 caballos de fuerza y 634 libras-pie de torque, Mustang se sigue renovando y demuestra que nada lo detiene.

El talento de los ingenieros mexicanos continúa aportando a este icónico modelo. Teniendo participación en el diseño de la séptima generación o en las pruebas de validación, los mexicanos siguen demostrando esa capacidad y calidad que, hace algunos ayeres, impresionó al mundo.

Actualmente se han producido más de 150,000 unidades de Mustang Mach-E y el modelo está presente en 39 mercados en tres continentes. Podemos confirmar que Ford no solo se ganó el segmento deportivo, si no que cuenta con un modelo que ha formado parte de la vida de miles de personas. Este emblemático deportivo mantiene el impulso para aquellos que quieren experimentar la adrenalina al máximo.

Hoy iniciamos una serie de celebraciones en el marco del 59 aniversario de Mustang y recordamos su gran unión con el país porque, así como nosotros, Mustang lleva a México en la sangre.