México es uno de los países con más vehículos en el continente. Con 55 millones de unidades, de acuerdo con el INEGI, en nuestro país no ha dejado de aumentar la cantidad de autos y camiones en los últimos 20 años, por lo que es clave que los mexicanos sepan cómo conducir de manera segura.
En el marco del Día Mundial de la Seguridad Vial este 10 de junio, Textar, fabricante líder mundial de productos de fricción para frenos, parte de TMD Friction, destaca la importancia de la tecnología de fricción y el mantenimiento preventivo de sus componentes para la seguridad de conductores y peatones.
Tecnología de Fricción: La Primera Línea de Defensa en Seguridad Vial
El sistema de frenos es, sin duda, el componente de seguridad activa más esencial en cualquier vehículo. Por medio de la fricción entre balatas/zapatas estáticas y los discos/tambores que giran con las ruedas, se logra que los vehículos se detengan.
Podría parecer un concepto sencillo, pero no lo es, cada marca y submarca automotriz tiene requerimientos específicos de frenado, según sus características, es así que la fricción no solo necesita materiales de alta calidad sino también una ingeniería precisa para adaptarse a las especificaciones. En Textar se dedica hasta dos años en el desarrollo de pastillas de freno para cada modelo, a fin de garantizar que se ajusten a lo requerido y proporcionen el rendimiento esperado en condición.
Mantenimiento preventivo de los frenos: el corazón de la seguridad
El nivel de especialización de los frenos de un automóvil hace que su funcionamiento dependa no solo de su excelencia de fabricación, sino también del mantenimiento que se les da una vez que están con su dueño, por esta razón, Textar te comparte tres elementos que ni tú ni tu mecánico deberían dejar pasar para asegurar que funcionen de forma correcta:
Pastillas/zapatas de frenos: este elemento estático es el que entra en acción cuando pisas el pedal de freno. Debes asegurarte que el material de fricción nunca tenga un espesor inferior a 3 mm., esté libre de corrosión, se encuentre desgastado de manera uniforme y esté bien montado.
Discos/tambores de freno: este elemento gira en conjunto con la llanta cuando está en movimiento. Las pastillas de freno entran en contacto con él para producir la fricción que detiene el vehículo. Debes asegurarte que el disco no se encuentre con deformaciones, esté agrietado o desgastado por debajo del grosor mínimo. Escucha a tu mecánico especialista para determinar si requieren cambio.
Líquido de frenos: en vehículos con frenos hidráulicos, esta sustancia transfiere la fuerza que aplicas al pisar el pedal, que a su vez genera presión a las pastillas de freno para que hagan fricción con el disco y se detenga el vehículo. Sin importar cuánto uses tu auto, este líquido absorbe humedad del ambiente, lo cual reduce su vida e incrementa las posibilidades de corrosión de los componentes metálicos del sistema de frenos. Debes cambiarlo según las indicaciones del fabricante.
Utiliza componentes compatibles de la mejor calidad
La mejor manera de garantizar el funcionamiento de tus frenos cuando los necesitas es utilizando piezas de calidad premium, a las que deberás darles mantenimiento con productos autorizados por la marca. Textar ofrece el máximo rendimiento y seguridad gracias a las pruebas que les realizan a sus productos con 300,000 kilómetros en carretera y 2,000 horas en laboratorios. Utiliza el Brakebook de la marca para localizar los componentes que necesita tu vehículo.