Actualmente nos encontramos en una tormenta perfecta en el transporte logístico mundial.
A las dificultades externas ya existentes como el retraso en el transporte mundial debido al aumento de la demanda postpandemia, se unen otros factores como el encarecimiento de los precios de la energía debido a la guerra de Ucrania -lo cual repercute en los costos de los fletes- o el colapso en el puerto de Shanghái motivado por la restrictiva política de «tolerancia cero» ante los nuevos brotes de COVID por parte del gobierno chino.
Ante este tipo de amenazas, se hace necesario contar con operadores logísticos que minimicen los costos de transporte y almacenaje gracias a una gestión eficiente del almacenaje y un servicio integral que abarque todos los procesos logísticos.
Tal como expresa Luis Enrique Sánchez, director de Hébora Park, «nuestras bodegas son refugios seguros en estos momentos de incertidumbre».
Gracias a la optimización del espacio que ofrecemos, apoyamos a que en la parte del almacenaje, el cliente no sufra con el constante aumento de los costos. Ofrecemos a nuestros clientes la posibilidad de almacenar su mercancía hasta que mejoren las condiciones generales del mercado mundial, en unas condiciones flexibles, adaptándonos a sus necesidades.
Tenemos servicios especiales como el Almacenaje Smart, que se complementan con nuestro exclusivo Método 1×1 de almacenaje flexible.
Logística y transporte integral
«Además, también es importante contar con operadores logísticos sólidos que realicen servicios integrales de logística», prosigue Luis Enrique Sánchez.
Los procesos básicos de una logística integral son:
- Revisión de la mercancía en su recepción.
- Clasificación.
- Consolidación y desconsolidación con la presencia del propio cliente, si así lo requiere. Se trata de la optimización de la mercancía en el menor espacio posible. «En nuestro caso, velamos por ocupar el menor espacio y efectuar el menor número de movimientos, de manera que eficientamos la operación del cliente», explica Luis Enrique Sánchez. Esto también contribuye a la mejor salida del producto mediante la fórmula del Cross Dock.
- Establecimiento de códigos de salida de mercancía en colaboración con el propio cliente. Dentro del método Cross Dock, es necesario el exhaustivo etiquetado y registro del mercancía -mapa de inventario- para minimizar tiempos y eliminar posibles errores en la preparación de los pedidos. De hecho, en Hébora Park se realizan varias verificaciones para asegurar el error 0 en los despachos a las unidades de carga , para garantizar la calidad y transparencia. «Se verifica la tarima antes de enviarla, desmontándola, para asegurarnos de que al centro de distribución le llegue en perfectas condiciones», comenta Luis Enrique Sánchez.
- Envasado de productos, con servicios adicionales como manipulación de pedidos -promociones de marketing de producto más regalo- o plastificación.
- Verificadores y Auditores externos. Comprueban que las cantidades y productos sean los declarados.
Inventario. Control exhaustivo de ubicaciones y conteo de unidades reales disponibles, para lo cual se congela la actividad momentáneamente. - Aseguramiento de la mercancía mediante un Seguro de Responsabilidad Civil.
- Certificación DC-3. Obliga a que los operadores montacarguistas, tengan la certificación que garanticen sus habilidades.
«La capacidad de un operador logístico de aunar todos los procesos necesarios en una misma operación junto a métodos eficaces de optimización de costos, permite a las empresas afrontar esta época de incertidumbre y de necesidad de protección y refugio de su mercancía hasta que las condiciones del mercado se estabilicen», concluye Luis Enrique Sánchez.